15 COSAS SOBRE MÍ

Hola chic@s. ¿Cómo lo lleváis? Ahora hace mucho que no os cuento nada sobre mí y aunque en la pestaña “El mundo a través de mis ojos” tenéis un decálogo para saber qué es lo que me gusta o cómo soy, he pensado en publicarlo como entrada añadiendo algunos puntos más. Sé que cuando se siguen muchos blogs, al final es imposible mirar en todas las secciones a no ser que aparezca en la página principal. O al menos eso es lo que me pasa a mí. Así que hoy os dejo “cotillear” un poco en mi vida con el fin de conocernos mejor.

 Esta soy yo:

1.- Tengo un fuerte complejo de Peter Pan. Pese a estar cada vez más cerca de los cuarenta, mi aspecto y mi carácter son los propios de una adolescente o una chica universitaria. De mi vida adulta solo me responsabilizo en encontrar un trabajo y pagar las facturas pero los demás convencionalismos sociales que serían propios de mi edad los aborrezco. En una ocasión tuve una compañera de trabajo que me puso el apodo de “Campanilla” porque era la única en la empresa que siempre sonreía e iba de un lado a otro como dando pequeños saltitos en vez de caminar como una persona normal. J Así que no es de extrañar que me veáis viendo dibujos animados, series para adolescentes, que me sepa todos los nombres de las Monster High o personajes Disney y Pixar y que me encante la literatura juvenil.

2.- Tengo un trasfondo oscuro. No es que sea Dr. Jekill y Mr. Hyde pero pasé por una etapa gótica y hay aspectos que todavía conservo. Desde pequeña ya apuntaba maneras por eso, ya que me gustaba ver a la Bruja Avería en el programa de televisión La Bola de Cristal, por ejemplo. Siempre me han atraído las brujas en general, los vampiros, hombres lobo, ninfas, la noche, la Luna… Vaya que nada de vestidos de princesas ni Barbies ni zapatillas de ballet. Lo mío eran los tonos oscuros (fui la primera en llevar las uñas pintadas de negro al colegio y os recuerdo que nací en el ’79) y la música rock. El primer disco fue un regalo de mi padre (The Final Countdown de Europe) a los ocho años. Lo ponía una y otra vez sin descanso para horror de mi madre, que es más de cante español, ¡¡ja, ja!!

 3.- Soy una Friki. Soy fan de Star Wars, El señor de los Anillos, The Big Bang Theory, Marvel, Sailor Moon, Juego de Tronos, Tim Burton y muchos más y no me escondo. Me encanta todo el merchandising que tenga que ver con ellos y cuando he podido (porque ahora estoy a dos velas) no he dudado en comprar camisetas, accesorios, muñecos, tazas, chapas para la ropa o la mochila y todo lo que os podáis imaginar. Y sí, también soy de las que se sabe los diálogos de memoria y entona las bandas sonoras de las películas y series.

4.- Mi vestimenta ideal son unos tejanos con unas Converse y una camiseta o sudadera, dependiendo de la época del año en la que estemos. Como ya os he dicho anteriormente, no va conmigo vestir según los dictados de la moda o lo que se considera que es más adecuado para una chica de mi edad. Y digo chica porque la palabra mujer la reservo para las que cumplen con un papel de madre o tienen responsabilidades mucho mayores a las mías. Esto me ha traído más de un quebradero de cabeza con mi progenitora que aún sueña con verme con un vestido o una falda un día que no sea para asistir a una boda. Y aunque sabe que tiene la batalla perdida desde hace tiempo, ella insiste. Pobre, no tienen nada que hacer conmigo… Donde estén unas zapatillas con tus tejanos más cómodos que se quite el resto. ¡Y las camisetas y sudaderas que hacen hoy en día son chulísimas!

5.- Mi estación preferida es el otoño. Por lo que el verano se me hace insoportable. Todo el día pasando calor y sudando, ¡qué asco!  Lo mío son los días más cortos, poder llevar una chaqueta y un pañuelo al cuello, tazas de café o capuchino humeantes, tardes de sofá y manta leyendo y excursiones y paseos por la montaña oyendo el crujir de las hojas secas bajo mis pies. Y los tonos ocres, marrones, amarillos y rojizos son bellísimos.

6.- Amo a los animales y la naturaleza y desconfío de los que no lo hacen. Tengo un perrito por el que siento devoción y puro amor. Siempre que hay ocasión nos escapamos a la montaña para dar largos paseos o pasar el día con unos bocadillos y refrescos. Y si hay algún río, mucho mejor. A mi peludito le encanta beber agua y refrescarse tras el ejercicio. Los bosques y el monte son lugares donde realmente desconecto de todo y soy capaz de escuchar mis pensamientos o tomar decisiones importantes. No hay nada comparable con el crujir de las hojas secas bajo mis pisadas, el viento meciendo las ramas de los árboles y el olor a tierra.

7.- Me encanta leer. Esto es bastante obvio pero no puedo dejar de omitirlo. No sabría vivir en un mundo sin libros. Leo desde pequeña y se me hace impensable salir de casa sin un libro o mi Kindle. Soy capaz de leer en cualquier lugar si la historia es buena y lo prefiero a tener que escuchar conversaciones ajenas en el autobús, el metro o en una cafetería. Mis templos son las librerías y las bibliotecas y el mejor regalo que me pueden hacer, una novela.

8.- Soy muy hogareña. Quizá porque me gusta tanto leer y adoro la compañía de mi perro, prefiero pasar un sábado por la noche en casa con una manta, bien acurrucada en el sofá y sintiendo el hocico de mi peque mientras leo. Supongo que eso lo hace también la edad porque cuando tenía veinte también me gustaba leer pero salía mucho, ¡¡je, je!! ;)

9.- Me gusta dormir. Y tendría que añadir que mucho. Nada de las ocho horas necesarias. Si puedo dormir diez, mejor. Y las siestas, aunque reconozco que me ponen de mal humor, cuanto más largas también. No lo puedo evitar, tengo tendencia a que se me peguen las sábanas. ¡Pero nunca llego tarde a los sitios!

10.- No puedo vivir sin chocolate. No concibo una existencia sin el placer del chocolate, en todas sus formas: tableta, tarta, pastel, muffin, galleta, helado, bombón… Y a poder ser negro. También me gusta el chocolate con leche pero el blanco no lo puedo ver ni en pintura. ¡Eso ya no es chocolate! Porque, ¿no me digáis que un trocito de chocolate con una taza de café o té no son los complementos perfectos para una buena lectura?

11.-  Soy una persona muy sensible.  Un rasgo de mi personalidad que en el mundo tan ajetreado, ambicioso y superfluo que vivimos se ve como una debilidad pero que yo he aceptado como un don. Soy capaz de percibir rasgos de las personas, captar sensaciones o vivir ciertos momentos del día con una intensidad que otros muchos no pueden. Y me da lástima porque no saben lo que se están perdiendo.  En su locura por llegar a los sitios, por ser los mejores, por complacer a todo el mundo, dejan de apreciar las cosas más simples pero más bellas que hay a su alrededor.

12.- Tengo mucha miopía. A la edad de 11 años empecé a llevar gafas y mis dioptrías fueron subiendo sin parar. Por lo que si no llevo mis lentes de contacto o mis gafas de pasta negras, no veo tres en un burro, como se suele decir. Solo espero que cuando sea viejecita no tenga muchos más problemas de vista para poder seguir leyendo tanto como me plazca.

13.- Me encanta la repostería. Aunque todavía no me atrevo con cosas muy complicadas, los bizcochos, las magdalenas y los cupcakes me salen muy ricos. Además concentrarme en preparar los utensilios, mezclar los ingredientes y la decoración una vez están horneados, me ayudan a relajarme y el aroma que queda en la casa a dulce es más efectivo que cualquier tratamiento de aromaterapia. Hace de mi piso un hogar.     

14.- Tengo debilidad por las libretas o blocs de notas (y el material de escritura u oficina en general). Cuando entro en una papelería o alguna tienda tipo Natura, Ale-Hop o Fnac y veo esas libretas tan bonitas con mensajes optimistas, paisajes de ciudades del mundo o animalitos es una experiencia similar a la de entrar en una librería. ¡Me las llevaría todas!

15.- Estoy totalmente en contra de los convencionalismos y estereotipos sociales. Por experiencia propia y ajena (o de personas conocidas)  he comprobado que hacen mucho daño a la gente. No entraré a detallar ninguno en particular pero es tan fácil como señalar que si algo no te gusta, una situación te incomoda o la presencia de alguna o algunas personas te desagrada, para que seguir adelante con ello solo porque lo diga la gente, porque esté fijado como una fecha importante en el calendario o sea considerado una tradición.     

Seguro que he olvidado algo como cual es mi color favorito, la comida que más me gusta o si utilizo hilo dental. Pero para eso está el blog. Para que con cada entrada y reseña me podáis conocer mejor y podáis dejar vuestros comentarios tanto si estáis de acuerdo como si no. Siempre que no se falte el respeto tod@s sois bienvenid@s a participar de La chica que hay en mí.

Nos leemos en el próximo post.