Hola chic@s. Ya estoy de vuelta por aquí. Disculpad la ausencia pero buscar trabajo llega a ser incluso más cansado que trabajar. Al menos cuando lo tienes dispones de una rutina pautada y unos horarios ya establecidos. Sino te pasas el día de un lado a otro, hojeando todas las páginas web de empleo y yendo de aquí para allá a las ETT’s o empresas de las que te llaman para entrevistarte. Un autentico descontrol y muchos nervios, vaya.
Es en momentos como el
que estoy pasando ahora cuando acudo a uno de mis géneros literarios
preferidos: el juvenil. Ya sea misterio, amor, fantasía, terror o simplemente
una historia sobre la amistad entre chicos y chicas, es la lectura que necesito
para huir del mundo de los adultos con sus responsabilidades y sus clichés (de
los que ya he mencionado algunos en entradas anteriores y de los que sabéis que
no me identifico con ellos para nada).
A ver, entendedme, soy
adulta y me preocupo por pagar las facturas, tener el piso en condiciones y
cuidar de los míos (que nuestros padres se van haciendo mayores y cada día nos
necesitarán más). Pero los que ya me vais conociendo sabéis que tengo síndrome
de Peter Pan y necesito alejarme de las obligaciones y conectar con la chica
que hay en mí.
Y hay que reconocer que
hay tantos libros buenos y con portadas o ediciones tan atractivas, que mi
lista de libros pendientes de este género es interminable y no creo que pueda
llegar a leérmelos todos nunca. Crecí con cubiertas bastante anodinas de las
editoriales que por entonces llenaban las estanterías de cualquier adolescente
o de las bibliotecas municipales; con tramas más o menos atrayentes. Y ahora entras en una librería y alucinas con
cubiertas muy trabajadas que van desde colores muy vivos a fotografías de
paisajes, objetos o chic@s con los que enseguida un adolescente se puede sentir
identificado o la siniestralidad de los libros de fantasía o ciencia ficción.
¡¡Hay novelas que solo las comprarías por el diseño de sus portadas!!
Por poneros algunos
ejemplos variados de las que sí me he leído os puedo mencionar las sagas de El club de los incomprendidos de Blue
Jeans; Retrum u Oblivion de Francesc Miralles; o Cazadores de Sombras de Cassandra Clare. O
las novelas La gramática del amor y El
corazón de Hannah de Rocío Carmona; Ángeles
desterrados, Como desees,
Ojos azules en Kabul o Dead7 de Anabel Botella, o la novela que
estoy leyendo ahora Fangirl de Rainbow Rowell,
de la que espero poder comentaros mis impresiones una vez la acabe. Para los
que también las habéis leído estaréis de acuerdo en que son irresistibles tanto
por lo que narran como por su presentación.
Y solo he mencionado unos
cuantos, todos españoles por cierto porque aquí hay mucha calidad y mentes
extraordinarias. Pero la lista es interminable y con el anuncio de cada nuevo
libro aparecen historias y ediciones aún más completas e irresistibles para los
adictos al género.
Vaya, que al igual que
cuando necesito ropa o calzado paso de la ropa de colores aburridos o sobrios
“más adecuados” para mí y me abalanzo a por las camisetas, sudaderas y
zapatillas de deporte de colores o con dibujos divertidos; cuando voy en busca
de lectura también me dejo deslumbrar por la calidad, para mí artística, de las
novelas que escojo como lectura. Y ya sé que much@s de vosotros diréis que es
normal porque son estrategias de marketing y todo eso pero os aseguro que si de
pequeña ya me gustaba leer, a día de hoy hubiese pasado de las muñecas y los
juguetes en general para atosigar a mis padres para que me compraran libros
nuevos cada semana.
¡¡Viva el color y la
literatura juvenil!!
Viva la literatura juvenil. Gracias por estar en esta lista.
ResponderEliminarBesos :*
Gracias a ti por tus historias de las que sabes que soy adicta. Qué ganas tengo de que vea la luz tu nueva novela para hacer una buena reseña de ella ;)
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